10.12.07

...que es el tuyo, que es la tuya

Son la niebla que te cala los huesos,
el frío que te hiela el alma
los que por la mañana te despiertan de los sueños que en la noche
se abrazan a otro cuerpo, que el tuyo
besan otros labios, que son los tuyos…

Y otra espalda, que es la tuya
lleva las marcas de mis uñas,
otras manos, que son las tuyas,
los impulsos de mi cuerpo
otro pecho, que es el tuyo,
el calor de mis susurros...

Son la niebla que te cala los huesos
el frío que te hiela el alma
los que por la mañana te despiertan de los sueños que en la noche
dijeron ‘te quiero’ a otros ojos,
que son los tuyos...

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4 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Sabes? a mi siempre me pasará lo mismo... bese los labios que bese siempre serán los de otro... diego no volverá a cruzarse en mi vida, lo sé... lo peor de todo no es quererle sin nada... lo peor es saber que es él... que solo no... no sé... es triste... y absurdo... las cosas tan importantes nunca deberían depender del acuerdo de dos personas... porque disminuye las probabilidades de acuerdo y al final... (si somos un poco exquisitas) al final no nos queda otra que conformarnos con otros besos... pero nunca serán iguales... pero mejores de otros que de ninguno...
ss

Anónimo dijo...

Y el fin de semana también tuvo tiempo para la poesía...

Anónimo dijo...

¿mejores de otros que de ninguno??? es usted consciente de a qué suena eso... jejeje... muak

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no debería llamar a esa cosa poesía... algún poeta podría levantar la cabeza y volver a morir en el acto... y no, no fue del fin de semana... ya ve lo que da de sí una mañana en el senado... con las manos escribo y la cabeza y los cuatro sentidos restantes puestos en el pleno de presupuestos... ¡y encima hasta vetamos! :)

Anónimo dijo...

no vamos a andar ahora con reparos morales... yo no debo fidelidad a nadie... la única ventaja de las historias de amor que nunca sucedieron...ss